Con estas fotografías pensarás más de dos veces si es cierto que la belleza del cuerpo humano se termina con la juventud.
La fotógrafa Anastasia Pottinger tiene en uno de sus proyectos fotográficos a los modelos menos esperados, quizás no los que nuestra mirada está acostumbrada a ver. Se tratan de mujeres y hombres que rondan los cien años y quienes aceptaron posar desnudos para la lente curiosa de esta artista.
Todo inició cuando Pottinger tuvo la oportunidad de fotografiar a una mujer de 101 años de edad, quien de manera voluntaria y con su consentimiento accedió a modelar para la fotógrafa sin ropa. La única instrucción era hacer tomas que no permitieran revelar la identidad de la modelo.
Al ver el resultado de este primer trabajo, Anastasia Pottinger se sintió tan orgullosa que decidió comenzar Centenarios, una serie fotográfica cuyos modelos son personas que estuvieran cerca del siglo de vida. Las imágenes que forman parte de la serie muestran la intimidad y la confianza que se establece entre fotógrafo y modelo.
Aunque la primer mujer, Lucy Hall, quien aceptó hace poco salir del anonimato, llegó sola a Pottinger, lo cierto es que conseguir al resto de sus fotografiados no ha sido fácil. De hecho, si conoces a alguien que tenga esa edad, tu abuelo, un vecino o alguna otra persona querida, Potinger sigue en busca de más modelos para captarlos con su lente.
Además de la búsqueda de modelos, Pottinger trabaja con un agente literario para lanzar un libro del proyecto.
Fotografía: Anastasia Pottinger
