La ciencia está llena de criaturas aterradoras que chocan en la noche, y el gusano bobbit está cerca de la parte superior de esa lista.
Ciempiés submarino bajo LSD. Lo siento, queríamos decir “gusano bobbit de noche”.
buceo / Shutterstock
Este gusano tiene un cuerpo delgado y cilíndrico que puede crecer hasta 10 pies de largo, oscilando entre el negro metálico y el violeta resbaladizo.
Su piel luminiscente podría convertirlo en una adición única a un acuario doméstico, pero su naturaleza agresiva pondría a sus vecinos marinos en un estado constante de lucha o huida.
Las características más distintivas del gusano bobbit son sus cinco antenas que sobresalen de su cabeza sin ojos y su boca ancha, revestida con mandíbulas afiladas que pueden partir a su presa por la mitad.
El gusano atrapará y matará su alimento excavando profundamente en los sedimentos del fondo del océano, dejando sólo sus sensibles cerdas descubiertas para detectar movimiento. Cuando detecta una criatura desprevenida, salta de su escondite y arrastra a la víctima de regreso a su madriguera.